Así, como chicle a 40º son las cosas de familia.
Entiendase esta declaración como una declaración de fe o de principios, como un axioma o como un teorema o como usted le quiera llamar; entienda además que proviene de un pequeño cínico, medio amargado del philum o subphilum – creo así decía “la tomatona”, mi maestra de biología de la secundaria – de los grinch.
La explicación es simple, el sábado estuve en una reunión familiar en dónde, para mi secreto regocijo, asistí a un continuo desfile de expresiones de What? Who? Where? or How? Incresendo inversamente proporcional según la edad del personaje que saludaba.
El motivo: una tradicional quinceañera mexicana, con coreografía y toda la cosa, de la hija de uno de mis primos, derivando en reunión familiar inesperada (Por cierto ¿Alguien me podría decir que leyes rigen la denominación de parentescos? La festejada ¿Será mi prima segunda o mi sobrina? ¿Existen, como dice una amiga, los tíos abuelos segundo por el lado de la madre?).
El punto: la cara de Who? y ¿Qué hago aquí? del novio o novia de algún primo que en un descuido – que conste, solo son las leyes de la vida – podrían traer un primo tercero; la pregunta de la chiquilla ¿Quién es ese? (mi primo) No puede ser nunca lo he visto….. y así hasta la despedida.
Y bueno, en medio de todo eso, las mascaras que se confunden y hacen aparecer alazanes donde deberían ser colorados o lacios en donde los rizos mulatos serían lo más lógico.
En fin, como los chicles, la familia es como los chicles, se estira, se decolora y pierde sabor …. pero sigue siendo el mismo chicle.