martes, 25 de noviembre de 2008

el peje y yo

te la debía. aquí va "el peje y yo". Dedicada al primo eugenio por ser panista y por ser un tipazo.... ordinario, pero tipazo.

No importa que no ubique las fechas con exactitud; de cualquier manera, la historia ya lo hizo. Andaba yo por el Distrito Federal, Morelos y Querétaro haciendo algunas preguntas, grabando horas y horas de charlas, trascribiéndolas.

Un día antes, un diputado federal con quien platiqué en su oficina en San Lázaro me decía algo así como "menos mal que pudiste entrar, se andaba rumorando que el presidente entregaba hoy su iniciativa de reforma petrolera y todo esto que ves iba a ser tomado para evitar madruguetes".

Como siempre que voy a la capital con mi peculio, me hospedé en el Corinto: hotel de tres pesos a cuadra y media del monumento a la Revolución. Ese día regresaba de Cuernava. Serían las cinco o seis de la tarde y aquella explanada estaba abarrotada. "Que ya viene el peje", "que es un honor estar con obrador" se oía entre las multitudes que, por naturaleza, son anónimas pero muy gritonas.

Apresuré el paso, dejé en el cuarto de hotel todo aquello que pensé podría perderse entre multutudes-chilangas-pro-prd y que me lanzo. Di un par de vueltas al Monumento, coleccioné algo de propaganda y muchas imágenes. Me acerqué al templete y, con la primera persona con la que me topé, inicié plática: se trataba de una chava, "soy una adelita" dijo.

Pasó el tiempo y me invitó a hacerle valla al peje."Ya viene". Desde el micrófono las consignas eran ensayadas y los discursos subían de tono. Era un honor estar con obrador, todos en coro. Y que sale del tsuru y que lo anuncia algún cuadro de esa izquierda y que todos gritan, lo reciben, le aplauden. A los de la valla nos saludó de mano, a todos los demás con un ademán al aire y con sus palabras.

Antes de que comenzara su discurso comenzó a llover. La gente no se movió. Se tomó protesta a los denominados defensores del petróleo, o no sé cuál nombre.

Empapado, con la propaganda humedecida, rodeado de adelitas y muchos soldados estuve en ese discurso que se transfirmó luego en toooodo lo de PEMEX, que fue el antecedente de la crisis del PRD.
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