Si le preocupa el futuro y teme a la recesión prepárese.
No hay mejor manera de prepararse que inscribirse a los Libres y Locos o a la Adicción. Si aunque usted no lo crea es una magnifica terapia para acostumbrarse al estrés y la ansiedad, pertenecer a una de estas cofradías le dará sentido de pertenencia (miserables y alienados), gastará lo poco que tiene en cosas inútiles y estúpidas: dos meses de salario en un bono para 8 partidos, dos hilazas de color para su muñeca izquierda y cada 15 días un par de ahoga perros y dos cervezas – una por cada medio tiempo – por el equivalente a de las cuotas de sociedad de padres de familia de cuatro chilpayates en escuela pública o una materia en el TEC.
Eso si, su cuerpo se acostumbrará a la montaña rusa de euforia y depresión que le producirán los sucesivos triunfos y derrotas de su equipo, cimas y simas tan altas y profundas que cualquier yuppie de Wall Street o McKinsey lo envidiaría y ahí está el valor agregado de este maravilloso y único medio de preparación para cualquier tipo de crisis- casa bolseros, mercado de derivados, inflación, estanflación, hipotecas sub prime, divorcios y salidas del closet – todo sin efectos secundarios.
Después de una temporada quedaras listo para sobrevivir a cualquier burbuja reventando, claro siempre y cuando no saques la cabeza del bus que asaltaron para ir al estadio y tus mocos se queden embarrados en algún sucio puente peatonal, ferrocarrilero o vulgar joroba.
