Paralelismos y divergencias. Presidencialismos y conservadurismos, gobernadores protagónicos y populismo. Conservadurismo en el sentido que maneja Roger Bartra en La Fractura Mexicana, populismo en el sentido clásico de dar al pueblo lo que quiera, no lo que necesite, como un mecanismo “generador” de altas tasas de rentabilidad política. Esa parece ser la “zaga” que contextualiza el ascenso y caída de los Kirchner, aderezado con un notorio – según las editoriales del Clarín – “autismo” político que se expresó en las maniobras de la parte masculina de los Kirchner. Impresiona como en dos años o menos, la pareja presidencial dilapidó el 23% de ventaja que le sacaron a la oposición en 2007. Impresiona el recuento de “errores” que según los editorialistas del Clarín llevan a la pareja presidencial (ella de la nación, él del partido) a la derrota. Desstaco tres características: i) “Torcer” o cuando menos llevar al extremo la legalidad para centrar el reparto del poder en sus personas (“candidaturas testimoniales”, cual “juanitos” redivivos y multiplicados” o la misma candidatura del señor Kirchner (duramente cuestionada por el domicilio registrado); ii) Asumir que “su” proyecto nacional llevaría mano por encima de los proyectos personales de los liderazgos locales y/o provinciales; y iii) El desapego a la realidad, buscando resultados inmediatos(dividendos políticos) más que soluciones de fondo (“maquillaje” de las cifras macroeconómicas, el pleito con el campo por las exportaciones de granos, la “nacionalización” de los fondos de la seguridad social, etc.).
Por cierto, en relación con esto último, junto con la radiografía de la debacle kircheriana el Clarín anuncia la inminente salida de la Ministra de Salud, explicándola por dos razones: i) El molino de viento (Swin flu) que sirvió a la Presidenta para verse muy “nacionalista” se convirtió en Caballo de Troya pues ya ha cobrado 28 vidas; ii) No aceptó una candidatura testimonial (Juanito llora).
Preguntas de fondo en cuanto a nuestro presidencialismo y el papel de los gobernadores ¿Serán los Bours, los Peña Nieto, nuestros futuros Kirchner? ¿Cómo resolverá el PRI el creciente poder de los Gobernadores versus el debilitamiento de su liderazgo central? ¿Podrá nuestro sistema político resolver la tensión entre la autonomía de los estados federados y la necesidad de un gobierno central fuerte pero acotado?