miércoles, 15 de julio de 2009

Descubrimientos de un viaje a casa

Que las nubes pueden dejar de ser un bonito paisaje para convertirse en la causa de turbulencias que le quitan la tranquilidad hasta al más dejado.

Que puede haber una persona con serios problemas económicos y con fuertes deudas encima, quien al hacerle una pregunta sobre porqué no se iría a vivir a tal colonia donde su novio tiene ya un terreno y podría comenzar a construirle una casa, me responde que no "porque no me gustan los pobres".

Que los años comienzan a notarse en mis padres, pero que a pesar de no haberse visto en meses, no dejan de extrañarse. Él se sienta en su silla de siempre, ella le pregunta qué quiere cenar. Yo sólo sonrío y juego con las cáscaras de pistache que hay en la mesa.

Que hay personas que no se van aunque se hayan ido hace años, y que una botella de vino puede hacer que vuelvan todos los recuerdos y las risas.

Un viaje a casa que ya hacía falta hacer.